Mis queridos insomnes...

El tocho de arriba refleja las visitas a este rincón por horas. Como veis, la mayoría os dais una vuelta por esta vuestra casa entre las diez de la mañana y las cinco de la tarde. Se ve que la banda ancha de vuestras empresas puede con todo.

Pero me ha llamado poderosamente la atención ese 0,99% que se deja caer a las cinco de la madrugada; el 0,64 de las seis, o el 0,97 de las siete.

Yo os lo agradezco, de verdad. Pero tratad de dormir un poco.

2 comentarios:

Titajú dijo...

A mi no me mires; normalmente desaparezco del mundo de los espabilados a las 23:30.

Anónimo dijo...

Pues yo soy de las que hacen cosas raras pero como mucho hasta la una de la madrugada, siempre que sea víspera de festivo.
Ah, y en el trabajo nada de nada, a pesar de tener internet en las narices.
El trabajo es sagrado (¡y eso que soy funcionaria!).